OLIMPIADAS GAY

Aumenta el número de atletas abiertamente LGTB en los Juegos Olímpicos

El número total de atletas LGTB fuera del armario que participarán en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 es el más alto de la historia, superior al de Atenas 2004 y Pekín 2008. Serán, según el recuento elaborado por Outsports.com, veinte deportistas olímpicos, dos paralímpicos y dos entrenadores.

En concreto, se trata de Matthew Mitcham (Australia, salto de trampolín), Edward Gal (Países Bajos, equitación), Lisa Raymond (Estados Unidos, tenis), Judith Arndt (Alemania, ciclismo), Seimone Augustus (Estados Unidos, baloncesto), Imke Duplitzer (Alemania, esgrima), Megan Rapinoe (Estados Unidos, fútbol), Marilyn Agliotti (Países Bajos, hockey sobre hierba), Carl Hester (Reino Unido, equitación), Carlien Dirkse van den Heuvel (Países Bajos, hockey sobre hierba), Mayssa Pessoa (Brasil, balonmano), Rikke Skov (Dinamarca, balonmano), Maartje Paumen (Países Bajos, hockey sobre hierba), Natalie Cook (Australia, voley playa), Alexandra Lacrabère (Francia, balonmano), Jessica Landström (Suecia, fútbol), Hedvig Lindahl (Suecia, fútbol), Lisa Dahlkvist (Suecia, fútbol), Carole Péon (Francia, triatlón) y Jessica Harrison (Francia, triatlón).
También Pia Sundhage, entrenadora del equipo de fútbol femenino estadounidense, y Hope Powell, entrenadora del equipo británico, son abiertamente lesbianas. Entre los deportistas paralímpicos tenemos a Lee Pearson, jinete británico, y Claire Harvey, miembro del equipo británico de voleibol femenino. También la luchadora Stephany Lee se había clasificado para los Juegos, pero no podrá acudir tras dar positivo en un control de sustancias prohibidas.
A pesar del importante aumento en el número de deportistas LGTB que se ha producido este año, la proporción sigue siendo muy pequeña. En concreto, con 12.602 atletas que participarán en estos Juegos, con que solo el 1% fuera LGTB (proporción que estimamos corta) estaríamos ante 126 deportistas, mientras que solo se conoce a una veintena de ellos. Apostamos a que todavía hay muchos atletas LGTB que aún no se han atrevido a hacer pública su condición.