Nueva York celebra la aprobación del matrimonio entre personas del mismo sexo
La imagen del Empire State Building iluminado con los colores del arco iris lo dice todo. La alegria desbordó las calles de Nueva York instantes después de que, en una decisión histórica, el Senado del estado, con el voto de cuatro republicanos (era imprescindible que al menos tres votaran a favor) diera luz verde a la ley que permitirá el matrimonio entre personas del mismo sexo, y que era rubricada instantes después por el Gobernador Andrew Cuomo. A partir de 24 de julio comenzarán las bodas.
El Gobernador Cuomo ha sido el principal impulsor político de la ley, que hasta el último momento ha estado negociando con los senadores republicanos para conseguir que fuera votada (el líder de la mayoría republicana, Dean Skelos, que votó por cierto en contra de la ley, podía haber hecho uso de sus atribuciones y evitar que el pleno llegara a votarla). Cuomo aceptó para ello las condiciones de los republicanos, en el sentido de que el proyecto incorporara plenas garantías jurídicas de que las iglesias y organizaciones religiosas no podrán ser demandadas por negarse a celebrar matrimonios entre personas del mismo sexo o por negarse a ceder las instalaciones de su propiedad para las celebraciones.Menos vistoso, pero igual de importante para muchos analistas, ha sido el esfuerzo del multimillonario alcalde de Nueva York, el independiente Michael Bloomberg, cuyas contribuciones financieras a las campañas de candidatos republicanos no son precisamente despreciables. “En las últimas semanas he tenido muchas conversaciones con nuestros senadores. Les he recordado que el matrimonio igualitario no es solo consistente con los valores americanos, también lo es con los valores republicanos básicos de libertad. Los republicanos que han defendido ahora estos principios serán recordados en el futuro por su coraje, visión y sabiduría. Dentro de 10, de 20 o de 30 años echarán la vista atrás y recordarán este como unos de sus mejores momentos”, ha expresado Bloomberg en un comunicado en el que envía un claro mensaje de apoyo a los cuatro senadores republicanos que se enfrentan ahora a la ira de los sectores más conservadores…
Rabia entre los homófobos
Y es que la ultraconservadora National Organization for Marriage clama ya venganza y anuncia una inversión de al menos dos millones de dólares en una campaña cuyo objetivo será evitar la reelección, en 2012, de los senadores que han permitido la aprobación de la ley.Por su parte, el arzobispo católico de Nueva York, Timothy Dolan, que también es el presidente de la Conferencia Episcopal de su país, y que se había significado como uno de los principales opositores a la nueva legislación, ha emitido un comunicado en el que reafirma que el matrimonio es “la unión entre un hombre y una mujer, una unión que dura toda la vida y abierta a los hijos” y que esa definición “no puede cambiar” por una decisión que llega a calificar como “trágica”.
Repercusión internacional
La noticia ha tenido una importante repercusión a nivel internacional, especialmente allí donde la discusión sobre la apertura del derecho al matrimonio a las parejas del mismo sexo está en estos momentos en primera línea del debate político, como sucede por ejemplo en Australia. “El hecho de que los legisladores de Nueva York hayan rechazado medidas a medias, como considerar la unión civil como un sustituto del matrimonio, envía un mensaje claro a los legisladores australianos para que hagan lo mismo”, ha declarado Alex Greenwich, director de la organización Australian Marriage Equality.
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